El pleno del Ayuntamiento de Calp debatirá esta tarde la declaración de 2025 como año del XX aniversario del Proyecto Ifach. En 2005 se puso en marcha el proyecto Ifach, una investigación arqueológica dirigida a documentar los restos arqueológicos de una pobla medieval de conquista existentes en la ladera del Peñón de Ifach.
El proyecto investiga los restos de una villa cristiana de nueva fundación que se levantó a finales del siglo XIII -1297- bajo el mandato de Roger de Llúria, Almirante de la Corona de Aragón, y que fue destruida parcialmente en el año 1359 en pleno conflicto castellano-aragonés y abandonada sobre el año 1400.
Este proyecto nació impulsado por la Diputación de Alicante, a través del Museo Arqueológico de Alicante (MARQ) en estrecha colaboración con la Consellería de Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana y el Ayuntamiento de Calp .
Con un amplio equipo científico pluridisciplinar, dirigido por el Dr. José Luis Menéndez Fueyo, desde 20025 se han sucedido diversas campañas que han contado con la participación de centenares de voluntarios procedentes de universidades españolas y europeas. A lo largo de los años el Proyecto Ifach ha ido superando las expectativas y generando una importante fuente de conocimiento de la historia medieval de Calp y su territorio.
Para celebrar el aniversario del comienzo de este importante proyecto de investigación, desde el Ayuntamiento se pretende declarar el año 2025 como el año del XX Aniversario del Proyecto Ifach en el municipio de Calp. Para esta tarea se considera conveniente constituir, bajo la dependencia orgánica de la Alcaldía, una Comisión conmemorativa del XX Aniversario del Proyecto Ifach, la cual se encargará de establecer las pautas para la elaboración de acciones y actividades conmemorativas, así como aprobar el programa general de los actos que se lleven a cabo.
Historia de la Pobla de Ifach
La Pobla de Ifach de Calp se extendía a lo largo de 70.000 m2 al norte del Peñón y presentaba una inmensa muralla de 800 metros de largo. El exterior de la muralla se usaba para la deposición de restos materiales y orgánicos. En la actualidad, se conservan 200 metros de la gran muralla en el área norte y diez torres en saliente. La mejor conservada es la torre campanario, que conserva 10 m. de altura.
Se completa el enclave con un complejo sistema de ingreso compuesto por tres puertas donde se encuentra un edificio de dos plantas identificado como un recinto donde se alojaba el poder y la administración de la Casa de Llúria, así como diferentes estancias, almacenes y casas donde residían los colonos y que actualmente son objetivo del estudio e investigación.
La Pobla de Ifach de Calp se empieza a construir en el siglo XIII, a cargo del almirante Roger de Llúria. Esta tierra es decida por la Corona a este personaje histórico tras su papel como militar y diplomático en el Mediterráneo en tiempos de la conquista cristiana (entre 1232 y 1245 bajo el reinado de Jaume I).
Allí comienza el proyecto en 1297 con la intención de ocupar los territorios que habían pertenecido a los musulmanes y usar para ello a la población de colonos cristianos (procedente de las comarcas centrales y occidentales de Cataluña) que se encontraba, hasta el momento, dispersa por las alquerías del término castral de Calp.
El cabeza de familia se encargó de la construcción de las primeras estructuras y murallas de la villa hasta su fallecimiento en 1305. La ausencia de su hijo y heredero varón Roger de Llúria y Lancia provocará que sean la viuda Saurina d’Entença y la hija Margarita de Llúria y Entença quienes se encarguen de su finalización. Con la intención de mostrar el poder y prestigio de la familia, esta última mandó construir una gran iglesia dedicada a Nuestra Señora de los Ángeles.
La historia de la Pobla de Ifach de Calp es más bien efímera, ya que tan solo llegó a durar unos 100 años. En el siglo XIV, la población se trasladó a lo que es en la actualidad el centro histórico y la zona amurallada de Calp debido, entre otras causas, a la Guerra de los Dos Pedros entre las coronas de Castilla y Aragón, que afectó especialmente a la región valenciana. En 1359 se produciría una parcial destrucción del lugar a manos de la flota castellano-genovesa y el lugar finalmente sería abandonado a pesar de algunos intentos de repoblación a principios del siglo XV.